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La enfermedad renal crónica (ERC) representa un grave problema de salud pública en México y todo el mundo. En 2017, se reportó una prevalencia de ERC del 12.2% y 51.4 muertes por cada 100 mil habitantes en México. Por ello, en este blog queremos brindarte información que te permita prevenir esta enfermedad, o bien, vivir de forma correcta con una enfermedad
Si tienes factores para desarrollarla, como: diabetes, obesidad, hipertensión y/o enfermedades del corazón, debes realizarte monitorizaciones por lo menos una vez al año, tanto de niveles de creatinina como de albúmina en orina, pues en ocasiones la creatinina permanece con valores normales, pero hay presencia de albúmina en orina, esto indica que el riñón comienza a tener problemas para separar las toxinas de los nutrientes del cuerpo.
Las principales enfermedades que afectan al riñón son: Diabetes, hipertensión y obesidad.
Diabetes Mellitus: Esta enfermedad daña los vasos sanguíneos del riñón, generando el incremento de la presión dentro del glomérulo, lo que ocasiona daño y desecho de proteínas.
Hipertensión Arterial: Al igual que la diabetes, esta es una enfermedad crónica, es decir, no se cura, solo se controla. El daño es muy parecido a lo que ocasiona la diabetes, respecto a los vasos sanguíneos.
En casos de descontrol, donde el nivel de presión arterial es muy elevado, puede ocasionar lesión renal aguda.
Es así como se puede generar pérdida de la función del riñón de manera súbita o al cabo de algunos años.
Obesidad: Produce cambios en los flujos sanguíneos renales, así como daño glomerular (filtro del riñón), es así como se ocasiona la activación de sistemas inflamatorios que conducen a un estado de fibrosis en los riñones, originando la pérdida de su función paulatinamente.
Existe evidencia actual respecto a que la pérdida de la función renal se asocia al consumo elevado de alimentos ultra procesados, así como productos naturistas.
Estos alimentos y productos son elaborados industrialmente y entre sus componentes se encuentran azúcares, harinas, grasas, sal, aditivos, edulcorantes, colorantes, etc.
Contienen elevadas cantidades de fósforo y sodio, que no siempre se declaran en las etiquetas, por lo tanto, son factores determinantes en el deterioro de la función renal, tanto en población sana y aún más en aquellos que padecen alguna enfermedad renal.
Si tienes alguna duda contacta al Dr. José Eduardo Vega Domínguez al teléfono: 871 793 1900.